viernes, 19 de febrero de 2010

Miercoles de Ceniza: Pour Angelique




*supuestamente este mini relato lo iba publicar este miercoles de ceniza, que en México se celebró el 17 de febrero, pero por cuestiones de logística, no pude subirlo*


Cinthya quería gritar, largarse de ahí para siempre. Abrir la puerta del auto y caminar por el asfalto mojado, resbaloso.
Es febrero pero poco importa qué dia.
El abuelo decia que el tiempo era como un niño jugando a las canicas. Cinthya siente lo humedo del suelo mientras la calzada de Tlalpan finge demencia en la inmesnidad de su caos.
El auto intenta segirla, impotente, como buscándole la cara. De pronto se detiene. Hubiese querido acelerar hasta el fondo, para cabara con la poca humanidad que quedaba; ella sigue su camino, entre Putas. Putos y putas.

Tiene Hambre , pero ni importa. El auto se ha quedado metros atras mientras el hombr de barba cerrada la observa a la distancia.

Tiene frío, pero no importa. Su chaqueta se quedó en el asiento trasero y a pesar de la humillación, Cinthya, caminando con la hermosura de su orgullo, sólo se cruza los brazos y baja su mirada. El autógrafo en uno de sus senos: "Pour Angelique, Je taime", se esta desvanenciendo. La lluvia comienza a caer y el hombre sale del auto. Quiere alcanzarla, pero no sabe cómo llamarla, hubiese preferido no sabotear la conquista de una noche. Piensa esto mientras se lleva las manos a la cabeza, pensando ¿qué salio mal?
¿el forcejeo? ¿el sometimiento? ¿la violencia?
¿la penetración?
¿la saliva?
¿el hecho de ser famoso?

El abuelo murió por causas desconocidas, dicen que se ahogó cuando el rio subió, pero Cinthya recuerda haberlo visto bien despues de las lluvias, sólo después de discutir con su madre fue cuando el abuelo enfermó grave. Su madre nunca pudo pedirle perdón. La maldición; el abuelo empeoró despues de su maldición.

La abuela hablaba del poder de las brujas.
Leyendas de poblados.

Fue un miercoles de ceniza;
y la maldicion de Cinthya salió de sus labios.

"ojalá te mueras, cerdo..."

Y fue entonces cuando detonó, la cabeza del hombre comenzó a colapsarse, el auto comenzó a arder sin control, los ojos sangraron, oidos, boca, el cerebro. El craneo estalla.

Cynthia sigio caminando entre las prostitutas...


"¡para que con provecho diga que soy una bruja!"

1 comentario:

Ariadna Lira dijo...

Bueno,muy origial el relato, aunque confieso que cuando leí "miércoles de ceniza" me imaginaba una crítica o algo así.Sabes, me gustó mucho aunque me parece una invitación aseguir el relato, se me figura un preambulo,el cierre me pareció corto,´como te digo, es un inicio muy bueno que hace imaginar cosas, muchas cosas más que pudieran seguir.Bien hecho poeta, como siempre.