jueves, 26 de mayo de 2016

Sed

Bebí de ti, como bebiste de mis labios,
bebimos los dos tu sabor: fruto maldito
y excitado de tu vientre,
probaste mi piel de mujer,
donde habita un ecosistema de metáforas internas.
La noche era bella
pero tú, peor.
Éramos poseídos por ella,
como dos locos en camas separadas babeantes por el idiotismo
la desesperación, amarrados con éstas camisas de fuerza de cotidianidad.

Desnude tu cuerpo con solo mirarlo,
con mis ojos boquiabiertos.
Deslice tus dedos por mi piel los perdí en mi entrepierna
Sutil, invitación a liberarme
Tu mano y mi mano amándonos con su humedad
apasionadamente, inexistente,
susurrando una fantasía invertida
susurrando un nombre con descaro mientras llegaba una y otra vez:

"Tu Nombre en Mi"

No hay comentarios: